jueves, 26 de noviembre de 2015

CRÓNICA: Ghost, La Riviera, Madrid, 25/11/2015

Papa Emritus III, versión sarcástica

Estaba realmente expectante por ver como se desenvolvían Ghost en los escenarios, tras prácticamente quemar sus 3 discos vigentes más el EP de versiones. Al igual que Kiss, toda la escenografía que utilizan, queramos o no, forma una parte muy importante de la identidad del grupo, y contrariamente a lo que pudiera parecer, no es lo más impactante a la hora de presentarlo al público, pero si se utiliza para resaltar unas canciones magníficas, juega un papel determinante. Kiss no estarían donde están sin un cancionero (la mayor parte de su etapa 70's) como el que tienen, por mucho maquillaje y trucos de escena que tengan y lo mismo pasa con Ghost. El caso de Ghost es que mucha gente los rechazó (o rechaza) en un principio por todo esa imagen más acorde a grupos de Death Metal, cuando son todo lo contrario...al igual que la lírica satánica que utilizan...yo mismamente me lo tomo a broma, es como un cómic...a mí lo que realmente me impacta es la música, que me parece de auténtica orfebrería dentro de un género tan denostado como es el Metal, en el sentido más ancho de miras. Y cuando la música y las canciones son tan buenas, tan bien hechas y tan bien interpretadas, una puesta en escena tan impactante como la que utilizan, no hace más que realzar el conjunto de su obra.

Si a eso le añadimos que el Papa Emeritus (version III para este disco, no lo olvidemos) es realmente un cachondo mental, alejado del papel que podría tener con esa imagen tan siniestra y terrorífica, tienen al público en su bolsillo. Lo de las máscaras de los Nameless Ghouls ya lo comenté en otro post con anterioridad: en esta gira son sencillamente espectaculares, están hechas con mucha clase, totalmente alejadas de sus primeros conciertos con esa imagen de monjes gregorianos ocultando sus rostros. Y a pesar de que no son unos virtuosos, tocan de auténtica maravilla. No se trata de tocar más fuerte que nadie, ni de forzar la voz, ni de abrumar a la gente con interminables solos y complicados desarrollos instrumentales. Todo está calculado al milímetro, en su sitio y es eficaz e impactante. Porque además tocan con actitud, no son estatuas tocando sus instrumentos.

A la banda se la ve segura, disfrutando de un estatus del que estoy seguro, no se hubieran imaginado hace unos años. Su popularidad ha subido como la espuma y está totalmente justificada. En mi opinión han facturado unos discos muy buenos, a cada cual mejor y encima están llevando toda su música mucho más allá encima de un escenario, y lo saben. Y nada más empezar el concierto apabullan al público con temas como "Spirit", "From The Pinacle To The Pit", "Ritual" y "Con Clavi Con Dio", poniendo toda la carne en el asador. Aquello sonaba escandalosamente bien, nítido y sin ensordecer a nadie. Seguramente sea uno de los conciertos con mejor sonido que he escuchado en La Riviera. Otros momentos realmente impactantes fueron cuando cayeron temazos como "Cirice", "Year Zero", "Body and Blood" o "If You Have Ghost". Cuando realmente rompen el molde es con la interpretación de "He Is", un tema delicadísimo en el que demuestran los grandes músicos que son, tanto a nivel interpretativo como compositivo. Es una canción que perfectamente podrían haber firmado Simon & Garfunkel y en el que el Papa Emeritus demuestra que no hace falta tener un chorro de voz, ni hacer gorgoritos imitando mal a cantantes de soul para cantar de fábula una canción. El tío es realmente bueno, probablemente sea uno de los cantantes que aproveche mejor su voz, siendo un cantante limitado.




Los impactantes y solventes Nameless Ghouls
A destacar también que la puesta en escena de Papa Emeritus se divide en dos. Digamos que al principio realmente se mete dentro de su papel de "antipapa" pregonando el satanismo, dando todo lo que el público espera de él (¡¡sacó hasta un botafumeiro!!) para después despojarse de sus ropajes y presentarnos una versión más irónica y sarcástica, como si realmente disfrutara de su rol de estrella, todo bajo el maquillaje pero dando más dinamismo a su puesta en escena. Todos esos gestos en plan de crooner de los 50 los hace magníficamente bien, dando las dosis de humor justas para que no tomen a la banda como un grupo de avanzadilla de la conquista de la humanidad por parte del Rey del Averno (que estoy seguro que algunos de sus seguidores piensan que así son). El final apoteósico con "Monstrance Clock" no hace más que confirmar que el grupo ha calado hondo en sus fans, la comunión con la banda es perfecta y aún retumban en mi cabeza los versos "come together, come together as one, come together for Lucifer's son".

Grandísimo concierto de una banda que ha sabido marcar territorio, emerger con personalidad propia y crecer muchísimo en apenas 5 años. Posiblemente, y espero equivocarme por nuestro bien, ahora mismo Ghost estén en el momento álgido de su carrera. Si los habéis visto, sabréis muy bien de lo que hablo.

martes, 10 de noviembre de 2015

CRÍTICAS: MICHAEL MONROE - "Blackout States" (2015)

La última etapa en solitario de Michael Monroe desde que se disolviera la última versión de Hanoi Rocks está siendo de ensueño. En el último lustro ha publicado 4 discos: uno de los mejores discos en directo de este nuevo milenio ("Another Night In The Sun"), formado por canciones de sus etepas en solitario, Hanoi, los tremendos Demolition 23 y alguna que otra versión ajena; y la trilogía en estudio que está probablemente entre lo mejor que ha hecho en toda su carrera. Una trilogía que comenzó en 2011 con el adrenalítico "Sensory Overdrive", le siguió otro álbum buenísimo lleno de energía pero no tan anfetamínico como "Horns and Halos" (2013) y llegamos hasta aquí con el recién publicado "Blackout States", que cierra el círculo con un álbum algo más reposado, pero lleno de canciones estupendas con algunas melodías realmente trabajadas.

Sorprende el hecho de que con cada disco de estudio, haya cambiado de guitarrista solista, cosa que podría afectar a la composición de cada disco. Ginger (The Wildhearts) fué probablemente el que más participó en labores compositivas en "Sensory Overdrive", pero supieron reponerse con el fichaje de Dregen (Backyard Babies), que aunque no compuso tanto como Ginger, sí que era un reclamo importante de cara al directo. Y bien, Dregen se fue y acabó llegando Rich Jones, que estuvo con The Black Halos (aún recuerdo su concierto en Madrid en 2001 y salir de copas con ellos, junto a unos desconocidos...tiempos de juventud que ya no volverán) y el poderío de la banda de Michael Monroe sigue impoluto. Está claro que todo el cotarro se lo ventilan entre Michael Monroe y Steve Conte, definitivamente su mano derecha y el pilar en el que se apoya Michael en esta última etapa. Sami Yaffa aporta en ocasiones su granito de arena en la composición, lo mismo que Rich Jones.

Como he dicho, el saber hacer y las tablas de Michael Monroe son un activo muy importante en su carrera. Cualquiera que haya visto a Michael en directo tanto en solitario como con Hanoi puede dar fé de ello. Es un animal salvaje, imprevisible y jamás podrás apartar la mirada de él. Se deja literalmente la piel en el escenario, realmente vive el rock n' roll. Que voy a decir...Michael Monroe es el Rock N' Roll en persona. Y encima lleva una banda realmente conjuntada y con mucha experiencia, y eso se nota en cada uno de sus discos.

El disco abre con "This Ain´t No Love Song", una canción realmente pegadiza, llena de aire Punk y con muchísima energía y que podría haber abierto cualquiera de sus últimos discos. El solo de Rich Jones es buenísimo...no es el típico solo simple que queda bien en cualquier canción de Rock de cloaca. "Old Kings Road", su primer single, está lleno de melodía, glamour y otra vez más, contiene una melodía perfectamente tarareable. Una tónica que se prodiga en el resto del disco, con canciones no tan anfetamínicas como Michael nos tiene acostumbrados. Medios tiempos guitarreros, con mucho aire callejero y mucho estribillo memorable. "Blackout States", "Keep On Eye On You" o "Goin' Down With The Ship" pertenecen a este grupo de canciones. Por supuesto que no se ha olvidado de sus canciones más rockeras y rápidas, como en "The Bastard's Bash" cuyo riff moderno me trae a la memoria el inicio del disco "Generation Swine" de Mötley Crüe, solo que la canción de Monroe es mil veces mejor o la tremendamente Punk "RLF", cuyo estribillo ("rock like fuck") seguramente será correspondido en directo. Otra de las facetas que me encantan de Michael Monroe es cuando te sorprende y coge el saxofón o la harmónica, porque el tío realmente toca bastante bien y siempre sabe darle el toque justo para que encaje en la canción, como en "Good Old Bad Days", con cierto deje a sus tiempos en Hanoi Rocks. A destacar también la composición del difunto Dee Dee Ramone, "Under The Nothern Lights" que regaló directamente a Michael Monroe...¡¡porque esta canción sólo la podía cantar alguien del norte de Europa!!.

"Blackout States" es un muy buen disco, que cierra con brillantez una trilogía de ensueño y una de las mejores etapas artísticas de Michael Monroe. A estas alturas de la película, poca gente puede desprender más autenticidad que Michael Monroe, el hombre que junto a Andy McCoy principalmente, labraron una de las mejores carreras de grupo de Rock en Europa con Hanoi Rocks y que cuya influencia fue vital para numerosas bandas angelinas del Sunset Strip, sobre todo visulamente (pregunten a Guns N' Roses, por ejemplo). Grande, muy grande Michael Monroe. Y nunca estará lo suficientemente reconocido.